300 años del nacimiento de Jean-Jacques Rousseau
>> martes, 26 de junio de 2012
Este 28 de junio se cumplen 300 años del nacimiento
de uno de los escritores, literarios y políticos, más sobresalientes de la
historia, Jean- Jacques Rousseau (1712-1778). Solitario, beligerante,
autodidacta, contradictorio a pesar de sí mismo, sus obras le valieron la
devoción de miles de los lectores y la abominación de los poderosos; de ellas
se desprenden nuevos modos de entender la convivencia y la educación de niños y
jóvenes, el origen del Estado y el yo como personaje de la literatura
intimista.
Especial Jean-Jacques Rousseau en La Gaceta
Ernst Cassirer
Este texto,
escrito por Ernst Cassirer y publicado por FCE, es un ensayo que nos ofrece una
visión panorámica de la Ilustración europea centrada en el examen de los
pensadores, entre los que destaca Rousseau, y cuya obra es referencia
inexcusable para comprender la modernidad.
El contrato social
Jean-Jacques Rousseau
Rousseau fue
uno de los primeros pensadores en afirmar que la igualdad social es el camino
para una sociedad más justa y honesta. En El contrato social puso límites a la
actividad de los gobernantes, anticipó los peligros que podían ocasionar los
abusos de poder, propuso que el pueblo dictara sus propias leyes y que
ejerciera una democracia directa sin delegar sus decisiones en otros
funcionarios.
Jean-Jacques
Rousseau
Iniciadas en
el otoño de 1776, Las ensoñaciones del
paseante solitario pueden ser consideradas como el testamento de Rousseau.
El término “ensoñaciones” alude tanto a los estados contemplativos, casi
místicos, como a las meditaciones basadas en el raciocinio más riguroso. Esta
traducción, de Mauro Armiño, ha tomado como referencia el texto definitivamente
fijado tras décadas de investigaciones eruditas; el prólogo y las notas aclaran
los principales problemas de interpretación del manuscrito.
Rousseau para principiantes
David Robinson
y Oscar Zárate
Rousseau para principiantes revela a un pensador rebelde cuyas
ideas revolucionaron nuestra comprensión de la infancia, la educación, el
gobierno, el lenguaje y muchas cosas más. Es una autobiografía en la que se
muestra al músico, poeta, novelista y botánico, pero sobre todas las cosas un
filósofo que negó terminantemente serlo y el primero en preguntar: ¿qué valor
tiene la civilización? Su respuesta: la civilización corrompe la bondad natural
del hombre y aumenta las desigualdades sociales, escandalizó a sus
contemporáneos, los iluministas, y aún hoy resulta provocativa.
José Valenzuela Feijóo
El autor recoge
los temas básicos de Rousseau y del racionalismo laico francés y los ubica en
su contexto histórico y, a la vez, los discute en función de su relevancia
actual. Al hacerlo, recoge los aportes de la Ilustración francesa, de Diderot y
Voltaire en especial. Por decirlo de alguna manera, el autor hace intervenir a
tales autores en la pólemica política de hoy: los trae a nuestro tiempo, con lo
cual critica a la burguesía con las armas primigenias de esa misma burguesía.
En este sentido, el libro es un alegato a favor de la razón, la ciencia crítica
y sus fueros. Por lo mismo, es también una dura crítica a los excesos del
posmodernismo y otras variantes del irracionalismo filosófico y clerical.
Rousseau. Emilio y Sofía o Los solitarios
Apenas
terminado Emilio, el gran tratado antropológico y pedagógico de nuestra
Modernidad, Rousseau se planteó continuarlo llevando a sus protagonistas a
París para comprobar de qué modo sus planteamientos podían vivir en la ciudad
de los hombres. Emilio y Sofía o Los
solitarios es esa continuación que quedó inconclusa no por pereza, sino por
la imposibilidad de Rousseau de plantear sus ideas en la ciudad. En París,
Emilio abandona rápidamente los preceptos de su educación y es abandonado por
la sumisa Sofía que, de repente, es una mujer de carácter, capaz de decidir por
su propia cuenta. Infeliz y desdichado, tan sólo cuando es hecho esclavo por el
turco Emilio recupera su libertad y contento. Esta obra muestra tanto la
grandeza de un pensador, capaz de darse cuenta de la fragilidad de todo su
sistema, cuanto su humanidad al ser incapaz de afrontar el fracaso de sus
grandes ideas.
Discursos sobre la desigualdad entre los
hombres y sobre el restablecimiento de las ciencias y las artes
Jean-Jacques
Rousseau
"Si
hubiera podido elegir el lugar de mi nacimiento, habría elegido una sociedad de
una magnitud limitada por la extensión de las facultades humanas, es decir, por
la posibilidad de ser bien gobernada, y donde cada uno al cumplir
suficientemente su empleo, nadie habría estado obligado de encomendar a otros
las funciones que estaban a su cargo; un Estado donde todos los particulares
por conocerse entre ellos, no habrían podido sustraer a las miradas y al juicio
del público las maniobras oscuras del vicio ni la modestia de la virtud, y
donde esta buena costumbre de verse y de conocerse hace del amor a la patria el
amor entre los ciudadanos, más que el amor a la tierra...” es parte del
discursos presentado por Rousseau; traducido y publicado en español en 2006 por
la editorial argentina Claridad.
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